¿Quizá te has ido aislando poco a poco?
¿Las circunstancias de tu vida te han llevado a esa soledad?
Si estás sol@ por decisión propia, estupendo. Seguro que disfrutarás de cada momento del día. Sobre todo si estás a gusto contigo mism@ la soledad puede ser una buena amiga. Y no te faltará compañía cuando la necesites.
Si tu soledad no es elegida puede que alguna de las siguientes circunstancias te haya llevado a ese aislamiento:
- Tus hijos se han independizado y viven lejos o no los ves todo lo que quisieras.
- Te has jubilado y ya no disfrutas de tus compañeros de trabajo.
- Has cambiado de ciudad y aún no tienes amistades en la nueva.
- Te has separado y has perdido las amistades de la pareja.
- No tienes pareja y con el tiempo te has ido encerrando en ti mism@.
- Te cuesta comunicarte porque piensas que no le interesas a nadie.
- Simplemente has dejado de relacionarte y ahora te cuesta volver a hacerlo.
Sé que no te gusta tu soledad, pero si no haces nada por salir de ella cada vez te pesará más.
La vida compartida es mejor, como dice un proverbio: “Una alegría compartida se transforma en doble alegría; una pena compartida, en media pena.”
Algunas sugerencias
- Recupera alguna afición que hayas abandonado como leer, pintar, cantar, bailar, ir al cine, hacer manualidades…
- Organiza tu día para que estés ocupad@ y entretenid@. No se trata de no parar sino de tener cosas que hacer.
- Recupera tu música preferida y escúchala cada vez que puedas.
- Sal a caminar por el placer de pasear. Y si te llevas tu música disfrutarás también de ella.
- Apúntate a algún curso interesante en tu ciudad, puede ser yoga, Pilates, manualidades, algún idioma, repostería, jardinería, informática, fotografía. Seguro que conocerás gente con la que puedes hacer amistad.
- Busca algún grupo de senderismo, suelen hacer caminatas los fines de semana y seguro que lo pasas muy bien.
- Hazte voluntari@ para ayudar a alguna asociación. Verás lo gratificante que es, como llena tu soledad y lo bien que te sienta sentirse útil.
- Selecciona algún programa interesante en la televisión, pero no te pases todo el día delante de ella. Eso te hace sentirte más sol@ aún.
- Escribe cosas tuyas, ideas, pensamientos, agradecimientos, logros, sueños. Escribe para ti, nadie lo leerá y te servirá para sentirte mejor. Algunos terapeutas aseguran que quienes escriben un diario tienden a ser menos propensos a la ansiedad y a la depresión.
- Proponte conseguir una meta un objetivo y haz cada día algo, aunque sea pequeño, por conseguirlo.
- Acude a exposiciones, conferencias, presentaciones de libros. Son lugares en los que la gente suele hablar y comentar y es fácil entablar conversación sobre el tema de la reunión.
- Habla con tus vecinos, con la gente con la que te encuentras habitualmente. Las relaciones con otras personas empiezan un día hablando de cualquier cosa en cualquier lugar. Y puede ser el comienzo de una amistad.
- Mímate, cuídate, arréglate, sonríe, agradece, medita, ayuda, aprende, enseña, busca, motívate. Atraerás a alguien que te necesite.
Alguien ahí fuera está esperando tu compañía, alguien que se siente sol@ como tú te necesita. Si no sales no te encontrará nunca.
(Fuente:www.exitoalos40.com)
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